Teatro Auditorio de Guadalajara

Guadalajara

Guadalajara

España

Una reflexión sobre el Proyecto del Teatro/Auditorio de Guadalajara Enfrentados con el problema de trabajar en una ciudad contemporánea proponemos considerar, por un momento, que estas son el fruto de una necesidad mas material que histórica. Y que, por tanto, estas deben aceptarse como hechos objetivos, visiones sin ánimo de trascender cuyo significado se concentra en las Superficies, en la materialidad de los objetos visibles y en su experiencia más inmediata. Para hacer tal afirmación, no hace falta tener en mente Kuala Lumpur o Los Ángeles. La extensión de tales condiciones por todas (casi todas) las ciudades del mundo es un hecho, al tiempo que una manifestación más, aunque poco glamorosa, del proceso de globalización, sinónimo no tanto de des­adjetivación como de homogeneización. Hecha esta afirmación, podremos describir los entornos urbanos como producto de la superposición de Objetos aislados e intrusos. Entornos construidos con un orden en el cual la repetición sustituye a la relación jerárquica, en el que los vacíos de un sistema Siempre inacabado imposibilitan una experiencia homogénea y continua. Este es el entorno en el que, con frecuencia, trabajamos como arquitectos hoy, y en el cual no debe haber renuncia a la arquitectura, pero si a la interpretación. No resultaría paradójico, por tanto, que nos atreviéramos a defender un proyecto precisamente por abundar en esta condición. Un entorno, un Solar, un perímetro, un programa..., todo ello apilado en un lado. En el otro, el particular equilibrio entre lo abstracto y lo concreto, por medio del cual se formulan las ideas arquitectónicas. Y el lugar físico, en su indefinición, en su inconsistencia, es sustituido por un estado de fuerzas, una condición de relaciones entre las partes del problema. El Teatro/Auditorio de Guadalajara afronta la arquitectura en estos términos, e intenta explotar tales limitaciones.

Luis Rojo de Castro, Begoña Fernández-Shaw Zulueta y Ángel Verdasco Novalvos

Miguel de Guzmán, Gema García Platero, Joshua Comaroff, Ho San-Chang y Manuel González Guijarro

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