Palacio de Congresos y de la Música Euskalduna

Bilbao

Bizkaia

España

La campa de los ingleses es el verdadero corazón vacío de la ciudad. Su posición en el plano es clara a este respecto. El antiguo centro ubicado en la ciudad vieja se ha ido trasladando hacia el ensanche, y hacia Deusto, pero las construcciones de los antiguos Astilleros Euskalduna y los depósitos de Renfe han impedido que, saltando hacia la ría, al contacto con el agua, se constituya como tal. La construcción del nuevo Museo Guggenheim y del Palacio de Opera y Congresos en los terrenos vacíos es la oportunidad buscada. Las dos piezas van a entrar en dialogo con la universidad de Deusto y el Museo de Bellas Artes. Son cuatro piezas en los extremos del parque de Doña Casilda de Iturriza que entrando en diálogo, tensionarán fuertemente el lugar, configurando un nuevo parque cultural. En este territorio el Palacio de Opera y Congresos va a aparecer como los gigantescos restos de un barco, un buque fantasma, que debió construirse hace ya tiempo en los antiguos astilleros Euskalduna y que, abandonado, se enterró en el fondo fangoso de la Ría. Su forma y construcción nos recuerdan las formas de un buque. Sus chapas y roblones aparecen oxidados. Nosotros tan sólo vamos a limpiar el interior y acomodar en él, como en las bodegas de un barco, diversas salas y los grandes espacios necesarios para su uso como Opera. Vamos a trasformar esta caja oxidada, y que hemos apoyado, como debe hacerse, en un dique Seco, en una caja de música. Con una doble piel interior que aísle y proporcione la forma acústica más adecuada a cada una de las tres salas. En cada bodega vacía apoyaremos o suspenderemos placas, plataformas, redes, bien de madera, bien telas metálicas; unas servirán como gradas; otras serán techos acústicos. Pero los apoyos serán siempre del mismo tipo.

Federico Soriano y Dolores Palacios

Carlos Arroyo, Alberto Nicolau, Angel Verdasco, José María Fanlo, Miquel Jareño, Alessandra Abbruzzense y Manuel Pérez

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