V-BEAU - España - Premiado - Ampliación del Cementerio de Camarma de Esteruelas
Ampliación del Cementerio de Camarma de Esteruelas




Premiado

Arquitectura

Nombre de la propuesta

Ampliación del Cementerio de Camarma de Esteruelas

Emplazamiento

Camarma de Esteruelas
Madrid
España

Resumen:

Camarma de Esteruelas es un pequeño pueblo de la Meseta Sur, a escasa distancia de Alcalá de Henares. Fundamentalmente agrícola, cuenta también con alguna industria y como tantos pequeños y grandes pueblos, en aras del progreso y por un pudor que trata de borrar la parte de su memoria asociada a las imágenes más sencillas de su pasado, se dedica con ahínco a la sustitución de las arquitecturas del barro y la cal por otras que Ie son ajenas. El viejo, pero nuevo, cementerio, a la entrada del pueblo, es un Caso significativo de tal actitud. Circundado por un muro de ladrillo, en zona que se prevé de expansión urbana, podría llegar a ser en la retina parte de un confuso magma cerámico, donde compitiesen por tomar protagonismo viviendas adosadas, escuelas y polideportivos. Se plantea la ampliación necesaria del mismo como oportunidad de reconducir la imagen del conjunto a terrenos menos ambiguos. Esta ampliación se concibe como extensión de las tapias hacia el sur, utilizando un lenguaje popular en la construcción y trayendo, con el sencillo recurso del revoco, la parte vieja hacia este mismo lenguaje. Un atrio en la nueva entrada sirve como lugar de encuentro y espera y, a pesar de su sencillez, no rehúsa mostrar una cierta solemnidad en su composición. Algunos acentos simbólicos, el trigo que es vida y la medida del tiempo que es vanidad, nos recuerdan el acto que allí Se representa. En el interior, con una sencilla ordenación de las losas y unos futuros setos, Se pretende evitar el carácter masificador de tantos cementerios, Creando pequeños recintos que favorezcan la intimidad.

Autor/autores

Carlos Puente Fernández

Colaboradores

José María Fernández Álvarez y José Antonio Valdés Moreno

Fecha de fin de obra:

  • 1997

Fotógrafo

Eduardo Sánchez