Hotel Ciudad de Zaragoza

Zaragoza

Zaragoza

España

El hotel se ha planteado como parte del Conjunto que constituye el ámbito de actuación del Plan Especial frente a las murallas, atendiendo a su condición de edificio en esquina y a su posición en la ciudad, y reflejando la distinta consideración de las dos fachadas principales, la orientada hacia el río y la enfrentada a las murallas, aunque sin perder por ello el carácter unitario. La planta baja se desarrolla mediante un porche en toda su longitud, que permite que los diversos episodios de la planta baja, tales como accesos al edificio y embocaduras de las calles, Se produzcan en un discreto Segundo plano. En las plantas superiores, las franjas definidas por los cantos de los forjados quedan delimitadas verticalmente por pilastras aplacadas de piedra, determinando unos entrepaños de dimensiones fijas, cuya resolución Se confía a un mismo material. La adopción de un sistema constructivo <> que, a la vez que hace posible una más depurada realización de los diferentes elementos constitutivos del hueco y conferir una adecuada escala a los mismos, permite dotar de un carácter unitario a las diferentes relaciones de hueco y macizo. En la planta quinta, la línea horizontal que representa el vuelo de hormigón, no sólo remata el conjunto hacia las murallas, sino que establece el giro de la fachada hacia el río, recogiendo la obligada línea de referencia de las edificaciones situadas junto a San Juan de los Panetes. La visión lejana del hotel, debida a su relación con el Puente de Santiago y con el Ebro, ha apoyado también la elevación de la altura, constituyéndose en remate las dos últimas plantas situadas sobre el vuelo de hormigón.

Basilio Tobías Pintre

E. Morales, J.A. García, M. Goizueta, L. Fleischer, Inco y Pablo Ciordia

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